Cuando la "crisis del rublo" golpeó de manera monumental la economía rusa durante los mediados de los años noventa, los que dependían de la exportación de materias primas como el petróleo, el gas natural, los metales o la madera eran los sectores más perjudicados. Este declive económico también afectó severamente a los que trabajaban en los campamentos de Tynda y, al carecer del registro reiterativo de los taladores norcoreanos por parte de los "guardianes" del régimen, muchos fueron quienes aprovecharon de esta confusión y consiguieron escapar primeramente a la ciudad de Tynda. Se calcula que aproximadamente fueron unas ochocientas personas.
En una pequeña ciudad rusa donde el número de los habitantes no pasaba los cincuenta mil, la avalancha de los necesitados norcoreanos ha sorprendido a la mayoría de los nativos. Muchos pensaban, ¿de dónde habrán salido estas personas? Estos agotados y ávidos pedían ayuda. Los gestos faciales con sus dientes debilitados y las manos moviendo manifestaban socorro y un techo donde refugiarse. La incomprensión del ruso era el gran obstáculo para ellos pero prontamente pudieron adaptarse a la sociedad rusa. Sacaban algunos rublos con el transporte de leñas o hacían pequeños arreglos manuales tocando la puerta de cada apartamento. A la inmensa mayoría le gustaba el trato agradable de la gente y han decidido quedarse ahí. Otros han sentido inseguridad y han emigrado a otras ciudades rusas.
También existen obreros que de manera provisional han pedido permiso a sus jefes norcoreanos para ir a Tynda y regresar al campamento a cabo de uno o dos años cuando la mejoría de la situación económica en Rusia ha sido notable. Con el dinero ganado, sobornan a sus jefes, compran su silencio, maldicen callado y salen para siempre de aquel infierno que tanto sufrimiento hizo vivir aunque percatan el alto precio de no ver a su familia eternamente hasta que semanas después darán cuenta que pueden hacer una llamada a sus familiares y coger nerviosos el teléfono del locutorio cercano.
No hay comentarios:
Publicar un comentario