La mala suerte perseguía a Shin Keum Dan desde sus inicios de la carrera deportiva pese a su brillantez y técnica intachable. Durante los años sesenta, esta atleta consiguió de forma no oficial a registrar marcas mundiales en la carrera de 200 metros, 400 metros y 800 metros lisos en diversos campeonatos considerados como no oficiales por la Federación Internacional de Atletismo y el Comité Olímpico Internacional en aquella época. Al haber tensión política y Corea del Norte no era oficialmente invitada en eventos internacionales, Shin tuvo que correr en acontecimientos donde sí que estaba permitida para los norcoreanos y una de ellas fue los GANEFO (traducido como los Juegos de Nuevas Fuerzas Emergentes). En aquella competición fue la primera deportista asiática en registrar unos récords mundiales pero que por su condición, sus registros jamás fueron recordados e inscritos de forma oficial.
Estaba previsto en participar en los Juegos Olímpicos de Tokio y era una de las personas que podía haber sorprendido al mundo con sus carreras pero fue vetada por el Comité Olímpico Internacional por participar en los GANEFO. En consecuencia, la delegación norcoreana anunció el boicot a estos Juegos y retiró a todas sus atletas junto a China e Indonesia, también partidarios de los GANEFO. Meses después siguió registrando récords mundiales en los Juegos Nacionales de Corea del Norte. Para destacar, su marca de 800 metros en estos juegos era incluso más rápida que el registro de la campeona olímpica en Tokio de la misma modalidad. Fue condecorada con los mejores honores en su país y posteriormente fue entrenadora para las promesas norcoreanas en el atletismo.
Sus palmares fue objetivo de los fisgones y por un tiempo, se dudó sobre su sexualidad porque su rostro parecía mucho al de un hombre. La otra página triste de su vida fue el breve encuentro con su padre, que al saber que su hija iba a Tokio voló directamente a la ciudad para verla. Fue un encuentro corto de diez minutos después de 13 años separados. Durante esa reunión de pocos minutos lloraron y abrazaron porque se trataba de la primera y la última vez que se podían ver (su padre murió en 1983). Fue una heroína en su país, pese a ser una víctima de pertenecer a un país de desacuerdos políticos, pero también fue una de aquellas miles de mujeres que tuvo que separarse y tuvo que tocar la gloria sin que su brillante trayectoria estuviera en el cofre de historias deportivas más respetadas como el de Paavo Nurmi o de Emil Zatopek.
En esta foto, se puede ver a Shin a punto de reunir con su padre en Japón después de 13 años
Nota 1: Los GANEFO fue la alternativa a los Juegos Olímpicos secundado por los países que fueron vetados por el COI. El Comité consideró que estos Juegos estaban politizados y no aprobó la participación de los países participantes en los GANEFO a los Juegos Olímpicos. En 1963, en su primer Juego GANEFO, participaron 51 países, entre ellos Corea del Norte.
Nota 2: Varios récords mundiales salieron en los Juegos GANEFO, como las de Shin.